En casa todo debe marchar adecuadamente para asegurar nuestra seguridad y la de nuestros seres queridos, y cuando algo no anda bien, acaba fastidiándonos de maneras inimaginables: cuando no va bien el internet no podemos trabajar o comunicarnos, y cuando no va bien el sistema de cañerías, no podemos mantener una buena higiene en el hogar.
Aunque estos problemas supongan un gran fastidio, no son los peores, ya que el peor problema sin duda tiene más que ver con la instalación eléctrica. Piénsalo: la electricidad llega a todos los rincones de nuestro hogar, afectando a la señal wifi, a la iluminación y calor del hogar ¡incluso a nuestra alimentación!
Sin electricidad, estamos ante un aprieto, pero esto no es lo peor; los problemas de electricidad pueden causar problemas mayores como una avería o un incendio ¡imagínate la catástrofe que se puede ocasionar si la red eléctrica no funciona bien!
La parte buena, es que estos problemas tienen una solución tan sencilla como cambiar la red. La parte mala, es que muchas veces no hacemos caso a las señales y no sabemos que nuestro hogar puede estar en apuros silenciosamente.
Señales que nos avisan de que algo va mal en el sistema eléctrico.
Afortunadamente, las señales están ahí, y si sabemos detectarlas podemos impedir que la cosa se ponga peor. Entre las señales existentes, podemos distinguir las siguientes:
- Clara antigüedad u obsolescencia del sistema eléctrico.
¿Las fechas no coinciden? El sistema eléctrico de tu hogar también tiene fecha de caducidad ¿lo sabías? Si tu hogar tiene un sistema eléctrico antiguo que no ha sido actualizado en muchos años, podría ser una señal de que es necesario considerar una rehabilitación para cumplir con los requisitos actuales de seguridad y eficiencia.
- Interrupciones constantes de energía.
¿Alguna vez has visto que en tu casa saltan los plomos? Si es así, no tienes por qué preocuparte, ya que este dispositivo te avisa a tiempo de que está habiendo un consumo excesivo de energía en casa que podría ocasionar problemas.
Por otra parte, si experimentas frecuentes cortes de energía (se va la luz) o notas que por cualquier cosa se van los plomos, podría ser señal de problemas en la red eléctrica que requieren de tu atención.
- Luces que parpadean.
Si observas luces que parpadean o titilan de manera constante pueden ser una señal de problemas en la red eléctrica, como fluctuaciones de voltaje o conexiones defectuosas.
- Enchufes o interruptores sobrecalentados.
Si los enchufes, interruptores u otros dispositivos eléctricos como la nevera o tu ordenador se calientan de manera excesiva, podría indicar una sobrecarga en el sistema o conexiones eléctricas defectuosas.
- Olor a quemado.
¡Cuidado con esto! El olor a quemado no supone nada bueno a no ser que estés preparando una barbacoa en el jardín. Cualquier olor a quemado cerca de enchufes, interruptores o paneles eléctricos es una señal seria de problemas y debe abordarse de inmediato, ya que, como imaginarás, puede originar un incendio.
- Cables desgastados o pelados.
No hay que pensárselo mucho; si ves un cable pelado o desgastado cámbialo antes de que te dé problemas. Los cables en mal estado representan un riesgo de seguridad y deben ser reemplazados.
Muchos animales como los conejos, los perros o los gatos tienden a morder los cables de electricidad a la vista para llamar la atención ¡mucho cuidado con esto! Ponles protección para proteger a tu mascota y a tu hogar en todo momento.
¿Cómo se rehabilita? ¿Y si afecta a todo el edificio?
Rehabilitar la red eléctrica de una casa no es sencillo, pero sí eficaz; este proceso requiere realizar mejoras y actualizaciones en todo el sistema eléctrico para garantizar la seguridad, y eficiencia en base a los requisitos de energía actuales.
En primer lugar, el profesional que vaya a tratar la rehabilitación eléctrica de tu hogar hará una inspección exhaustiva para detectar el problema. Debe determinar si el problema afecta al hogar o afecta a un edificio completo, en el caso de que sea un piso. Tal y como argumentan los expertos de la empresa GENEO, la rehabilitación del sistema eléctrico de un edificio debe hacerse de forma integral atendiendo a todas las variantes que afecte dicho problema.
En la rehabilitación, los profesionales también deberán identificar las áreas que requieren mejoras y actualizaciones para cumplir con la normativa eléctrica actual.
Tras la planificación, los profesionales comenzarán su trabajo desconectando previamente toda la señal eléctrica e instalando la nueva. Una vez hayan hecho su trabajo, deberán hacer las pruebas pertinentes que indiquen que por fin está todo correcto en el edificio o la casa.
Durante la rehabilitación no es necesario salir de la casa si el problema no llega al punto de necesitar tratamientos invasivos. Aun así, es recomendable no estar en la casa durante el tratamiento de la red eléctrica.